viernes, 12 de abril de 2013

"Poesía" en la calle






Además de diversas pintadas en la calle, también tuvieron mucha importancia diferentes panfletos propagandísticos como los que mostramos a continuación:



Desde la revuelta de ayer  al discurso ultra conservador y anti mayo 68 de hoy. Han pasado 40 años de reflexiones e interpretaciones

Mme Klein. Redactora de Le vif  “Cuarenta años más tarde es bueno recordar que las crisis pueden ser perfectamente oportunidades a apreender”







¿Un siglo de revoluciones? ¿Un siglo de quimeras? ¿Un siglo de reflexiones sobre el ser humano y su dimensión? ¿Un siglo de abrir los ojos a la injusticia para volverlos a cerrar? ¿Un siglo de sensiblería? ¿Un siglo de piedad hacia otros seres humanos más desfavorecidos?
¿Quién las ha ganado estas revoluciones

¿Liberté Egalité Fraternité? ¿Qué dices, en que idioma hablas? ¿De qué va esto?

¿Hacia dónde caminamos?

¿Nos hace falta un nuevo Mayo del 68 ?








El mundo en 1968

La Primavera de Praga ¿En qué se convirtió la eclosión de libertad. ¿Qué supuso para la Checoslovaqua de Dubcek?

La Guerra en Vietnam y Camboya.          ¿De verdad la ganó el Viet Cong?

La Revolución cubana. Cuba bajo la órbita soviética. Y sigue y sigue aunque ya su mentor desapareció. ¿Es más feliz el pueblo cubano? ¿Podemos adivinar ya el final de su recorrido?

La Revolución Cultural China. ¿O una depuración en toda regla?

Asamblea en la Sorbonne

Agitación en las calles
…………………………….y se abrirán los grandes bulevares.

¿Obreros y estudiantes unidos?



Jean Paul Sartre y Herbert Marcuse







Reflexión actual sobre el movimiento estudiantil de Mayo de 1968

Quisiera comenzar,  a modo de reflexión,  sobre nuestro tema –Revoluciones- con unas consideraciones sobre  aquella entrevista estudiantil al filósofo francés Jean Paul Sartre con motivo de la mal llamada revolución estudiantil de Mayo del 68,  ya que no quedó de ella, políticamente hablando, más que el recuerdo de una revuelta, bastante romántica, eso sí,  y de un hecho contestatario y curioso que eclosionó la sociedad francesa, que ya comenzaba, una vez superada la postguerra, a estar harta de la mala gestión política al no conectar los intereses de la clase política con los legítimos intereses de una sociedad en marcha,  tanto la estudiantil como la obrera.

Dicho de otra manera,  cómo los hijos de los obreros, estudiantes de Nanterre, hicieron suyos postulados que en buena parte, eran los de sus padres los cuales trabajaban en las fábricas por escasos salarios.

Aunque hemos aprendido que no es verdad que la Historia, con mayúsculas, se repite, es posiblemente lo que puede estar ocurriendo ahora.

Digo reflexión,  porque para explicaciones sobre el Mayo del 68 me remito mejor nuestro “querido Google” (San Google para algunos), a la extensa bibliografía de todos los colores y tendencias, desde las más cercanas al hecho histórico y  por consiguiente más calenturientamente revolucionarias,  a las  más sesudas y asentadas posteriores. También a los fácilmente accesibles artículos y noticias periodísticas de la época y a los posteriores que matizaban su significado haciéndolo o inicio de posteriores filosofías y modos de pensar y hacer políticos o punto de reflexión sobre el poder de la juventud y su papel en la sociedad.

El que suscribe, es de los que idealizando la cortísima revuelta pensaron una cosa y acabaron pensando otra. De una furibunda tormenta en una calurosa noche de verano,  esto es,  bonita y refrescante, como si fuera una alto en el camino a mucho ruido y pocas nueces.

Me remito también, cómo no, a la cantidad enorme de fotos (algunas de las cuales espero que nuestros técnicos informáticos cuelguen aquí) que han deleitado y siguen deleitando y embobando nuestras mentes con sus frases grandilocuentes y bonitos poemas.

Decía,  y digo,  que me quiero centrar en las breves y certeras respuestas del gran sátiro (y si no que se lo pregunten a la sufrida Simone de Beauvoir) y filósofo a las preguntas del estudiante,  ya que no han perdido actualidad y menos en el entorno actual universitario.

Le preguntaban:

E: ¿Qué es la cultura?
JPS: -La cultura es “algo” que al ofrecerse se cuestiona.
E:¿Qué es el saber?
JPS: -El saber es siempre algo más de lo que creíamos que sabíamos. Apenas lo aprendemos y creemos que lo hemos adquirido aparece un nuevo saber que nos pone en cuestión lo que sabíamos.
E:¿Para qué sirve la Universidad?
JPS: - Solo para formar a hombres que cuestionan.

Sartre parte  de que el ser humano (estudiante) no está dando por sentado y cierto, unas enseñanzas que son inamovibles.

Llama, sin duda,  a la puerta de la objetividad, pero da más de un toque certero  en la  capacidad humana de poner en cuestión “todo”, partiendo de las premisas más ciertas e inamovibles y que parecen incuestionables. Entiendo esta actividad básica y motor para todos,  tanto para el enseñante como para el enseñado.

Algunos de nuestros profesores sigue, en el oficio y práctica universitaria, como desde la Edad Media (Giordano Bruno, Galileo y antes Pedro Abelardo, entre tantos), en que comenzó a practicarse, este básico y simple postulado y otros desgraciadamente no.

Quizá no lo siguen, no porque no lo sepan,  sino porque al “enseñado” le resulta mucho más fácil no entrar en la cuestión de cuestionar.
Es más fácil, sin duda, no cuestionar, aunque para ese viaje no hacen falta estas alforjas,  o dicho en llano,  personalmente soy de los queiensan que “al templo del saber” versus University,  se viene a poner en cuestión todo, todo.


Es importante ya que nos va la propia vida. Es la cuestión única. En la foto de la derecha, vemos a la rica heredera Carolina de Bendern ondeando una bandera del FNL vietnamita, lo que provocó que su abuelo la desheradase.





martes, 2 de abril de 2013

Lemas Revolucionarios Cubanos

Pintura callejera que muestra los principales protagonistas de la Revolución Cubana: Fidel Castro y Ernesto Che Guevara. Es posible distinguir también un mínimo de cuatro banderas cubanas y a ocho guerrilleros celebrando la victoria de la revolución socialista.

En este caso, las palabras escritas en una pared reflejan una perfecta definición de la revolución cubana: la lucha por la vida (mejora de las condiciones), la voz de la ilusión (fue un movimiento de cariz popular) y la voz de la utopía (referencia a las dificultades que sufrió el país).

Dos graffiti en apoyo al principal líder de la revolución y hasta 2008 jefe de estado de Cuba, Fidel Castro, aquí referido cariñosamente con el nombre de pila. La Cuba socialista, igual que otros regímenes comunistas, hizo hincapié en el culto a sus líderes como muestra de fidelidad a la revolución.
Aquí podemos ver una identificación de la bandera cubana con la famosa figura de Che Guevara, cuya intervención fue esencial tanto en el triunfo de la revolución como en la propagación de sus ideales. El argentino continua siendo hoy en día una referencia a la libertad y a la revolución.

Por último, una estampa del Che Guevara en una de sus poses más mundialmente famosas: fumando un puro cubano y mirando cabizbajo, pensativo. Lleva también la gorra con la estrella comunista y un sencillo traje de militar.

La Revolución Cubana

La revolución cubana fue un movimiento intelectual y armado que supuso el derrocamiento de la dictadura hasta entonces imperante de Fulgencio Batista y la imposición de un sistema político y económico inspirado en el marxismo-leninismo.

Normalmente se fija el 26 de julio de 1953 como el inicio de la insurrección debido al asalto infructuoso de Fidel Castro a la caserna de Moncada, en Santiago (este del país). Castro y otros atacantes fueros capturados y encarcelados hasta la amnistía de 1955. Una vez en libertad, el cubano creó el Movimiento 26 de Julio y se dirigió a Méjico para preparar la lucha armada. Los principales integrantes del grupo fueron: Fidel Castro, su hermano Raúl y el argentino Ernesto Che Guevara.

La vuelta a Cuba, mediante un desembarco secreto, fue un desastre y los revolucionarios tuvieron que esconderse en la sierra, donde desarrollaron la táctica de guerrilla y contaron con el apoyo popular. En el transcurso de les campañas rurales, Castro publicó el Manifiesto de Sierra Maestra, de cariz nacionalista y constitucional. Entre 1956 y 1958 la guerrilla, unida ya al movimiento de resistencia urbana, fue consiguiendo progresos hasta la ocupación de Santiago y otros centros importantes del país.
El dictador Batista se vio obligado a exiliarse y el 2 de enero de 1959 los revolucionarios, con Castro al frente, ocuparon la capital del país, la Habana. Pese a la voluntad de reformismo del principio, pronto se inició la reforma agraria y la depuración de los sectores moderados.

Las represalias económicas de los Estados Unidos (1960,) provocadas por el temor al nuevo régimen, provocaron el acercamiento de Cuba a la URSS, acentuando el cariz socialista de la revolución. Sucesión de medidas políticas socialistas: nacionalización de las compañías petrolíferas y las grandes empresas, abolición de la propiedad arrendada, proclamación de la Primera Declaración de la Habana contra el imperialismo norteamericano y exilio de la burguesía.

La oposición de Estados Unidos a la implantación de un régimen comunista tan cerca de sus fronteras y en su área de influencia provocó el intento de invasión conocido como el desembarco de Bahía de Cochinos. La intentona terminó en fracaso debido a los éxitos del servicio de inteligencia cubano.

La alianza entre Cuba y la Unión Soviética se materializó en el proyecto de instalación de misiles con ojivas nucleares capaces de alcanzar diversas ciudades de la costa este de los EE.UU. Debido a la actitud de determinación mostrada por el presidente Kennedy y la posibilidad de una guerra nuclear, el presidente soviético Jruschov acordó la retirada de los misiles. A parte del paréntesis militar, la URSS también se benefició del bloqueo económico impuesto a Cuba con ventajas comerciales: compra de petróleo y venta de azúcar a precios fuera de mercado.
En 1965 el Partido Socialista Popular se convirtió en el Partido Comunista de Cuba. La determinación de Castro de extender la revolución se tradujo en la intervención cubana en los conflictos de Angola (1975-90), Etiopia (1977) y Nicaragua (1979). Castro se ha mantenido en el poder hasta 2008, momento en que cedió el poder a su hermano Raúl debido a su delicado estado de salud.